¿Se puede combinar el beneficio del juego y su importante valor social con el beneficio de masticar y la expresión biológica y adaptativa de las conductas depredadoras del perro?
Este producto también nace con este objetivo: poder garantizar a nuestro perro una masticación sana, natural y libre de crueldad (los ciervos pierden sus astas al final de la época de cría de forma totalmente natural e indolora) y poder jugar. un papel activo para compartir este recurso en serenidad, combinando relaciones, juegos y diversión con los ya grandes beneficios que se derivan de proporcionar snacks naturales.
Pasatiempo antiestrés Cotonosso
El álamo no sólo garantiza a nuestros animales la posibilidad de aliviar estados de ansiedad, estrés, aburrimiento mediante la masticación y el mantenimiento de sus dientes limpios, sino que también aporta gran cantidad de sales minerales, omega-3, omega-6, condroitina, aminoácidos, oligoelementos. y colágeno, contenido naturalmente en la médula ósea de la asta del ciervo.
La cuerda de algodón que rodea el hueso nos da la oportunidad de incitar a nuestro perro a proponerle un intercambio social basado en el juego, que sin duda constituirá, si bien gestionado, un estímulo positivo adicional para construir la relación con nuestro compañero de vida.
Jugar con este innovador y fascinante snack puede permitirnos, una vez más, conseguir que nuestro perro ejerza de forma saludable conductas competitivas y depredadoras que, sobre todo por la protección de otros animales, conviene controlar en el contexto natural. pero que, para la satisfacción emocional de nuestro animal, podemos volver a proponer gracias a los snacks de la línea, en contextos construidos, pero sanos, protegidos y seguros.
Con el álamo tendremos un papel aún más central en la expresión de estos comportamientos y podríamos, quizás bajo la cuidadosa guía de un experto que sepa guiarnos en la lectura del comportamiento del perro, entrar en mecanismos que a menudo permanecen ocultos a las personas y profundizar aún más en la relación con el perro, garantizando al mismo tiempo diversión, comunicación y bienestar.
Mucho más que un snack y extraordinariamente más que un simple juego.
Porque jugar con el perro es algo serio e importante, que nos permite hablar con él a un nivel profundo e intenso y que finalmente puede permitirnos convertirnos verdaderamente en el mejor amigo de esta criatura única, acogedora, comunicativa y extraordinaria.
Dra. Marina Garfagnoli
Entrenador de perros