Si tienes un roedor como un conejo, un hámster, un conejillo de Indias o un jerbo, es importante estar consciente del aumento de las temperaturas. Los roedores son más vulnerables al calor y al sobrecalentamiento que otros animales; por lo tanto, es fundamental ofrecerles un ambiente seguro y confortable.
Ubicación de la jaula
La jaula de tu roedor debe mantenerse en un lugar fresco y ventilado. Evita exponerla directamente a la luz solar, ya que los rayos directos pueden aumentar rápidamente la temperatura dentro de la jaula y provocar golpes de calor.
Agua fresca y abundante
Asegúrate de que tu roedor siempre tenga agua fresca y limpia a su disposición. Durante los días calurosos, pueden tener más sed, así que reemplaza regularmente el agua para mantenerla fresca e incentivar a tu pequeño amigo a beber.
Enfriamiento natural
Puedes ayudar a mantener fresco a tu roedor ofreciendo materiales frescos y naturales en su jaula, como heno fresco o pequeñas piedras volcánicas. Algunos roedores también aprecian camas de cartón refrigeradas o geles especiales para animales, que pueden ayudarles a soportar el calor.
Alimentación ligera y fresca
Durante los meses calurosos, trata de ofrecer alimentos frescos como verduras y frutas que ayudan a mantener a tu roedor hidratado y nutrido de manera saludable. Sin embargo, ten cuidado de no exagerar con las cantidades de fruta, ya que puede causar desequilibrios digestivos.
Proteger a tus roedores del calor es esencial para garantizar su bienestar. Con algunos cuidados, podrás mantenerlos frescos y felices durante la temporada calurosa.